martes, 2 de agosto de 2011

CASI CIERTO

Sakayama estaba recostado en la cama junto a su nueva pareja.
Después de haber tenido su primera sesión de sexo ella se pasó una hora acariciándole los testículos.
Algo que ella parecía disfrutar enormemente. 

 
Mientras él lo disfrutaba en la misma forma, se volvió hacia ella y le preguntó:
- ¿Pol qué te gusta tanto acalicial mis testículos?

Y ella con voz tierna le respondió:
- Porque extraño los míos.   



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1 comentario:

Francisco dijo...

Hola. bienvenido el pis volvio a la lucha. estuvo muuuy quieto en los ultimos tiempos. gracias por el humor.