viernes, 31 de octubre de 2008

miércoles, 29 de octubre de 2008

Estatuto autonómico de la república unitaria de Valizas

Título primero
Artículo 1. Valizas es un Estado independiente de cualquier otro.
Art. 2. El sistema político del Estado Valicero es una república unitaria, con capital en Barra de Valizas, está compuesto por los territorios actuales, mas los que se reclaman por razones históricas; como en justicia divina son: la región de Laguna de Castillos, Cabo Polonio, Aguas Dulces, Rincón de los Olivera, Rincón de Valizas, Paso de los Adobes y todas aquellas tierras que nuestros antepasados ganaron en cruentas y justas batallas. Se consideran territorios propios también del Estado toda la costa Atlántica. Y se concede la autodeterminación a La Paloma, a la que se le dá libertad para abandonar el Estado y asociarse con quien quiera asociarse con ellos.
Es Estado asociado de Valizas, la República Independiente de los Coquitos (ex Castillos) .
Art. 3. El escudo del Gran Estado de Valizas estará compuesto por la figura de la isla del Marco, el camarón, el capiz y el sirí. En representación de la fortaleza espiritual, la libertad para deambular, el arraigamiento y la abundancia.
Art. 4. El himno del Estado de Valizas a diferencia del de la República O. del Uruguay, no tiene letra, pero no tiene música.
Art. 6. Son ciudadanos de Valizas, todos aquellos nacidos en su territorio citados en el art. 2 y en los territorios de ultramar (isla Seca, isla del Marco)
Art. 7. La lengua oficial del Estado es el Valiceño, que todos tiene el derecho y el deber de conocer. Las instituciones valiceras promoverán su uso y serán especialmente escrupulosas de que en dicha lengua vengan traducidos los billetes del banco, los boletos de Rutas del Sol y los tickets, así como los carteles promocionales de: El Puente, Autoservicio del Mar, Los Brujos, Tio Pato, Notanquetan, Sabrosuras Agua na Boca, la casita del árbol, Mac Yiye, ilocal, el menú de la pizzería de Cholo, la carta de la Proa, las cerámica de Aripuca, la lista de precios de la escuela de Surf, los carteles de advertencia de los Guardavidas, la cartelera de Tres y la del Comi raje.
Los que no sepan hablarla, deberán ir a clase los martes y los jueves después de comer, en punto al local destinado a tales efectos.
Art. 8. El idioma Valicero es el único oficial en todo el territorio, y el único permitido. En el proceso de normalización de nuestro idioma, se eliminará la terminación ado que será sustituida por la ao, llamada a partir de ahora terminación valicera (ejemplo: abombao en vez de abombado) y se usará la muletilla güei para referirse a cualquier cosa especialmente cuando uno lo sabe todo (ejemplo: güei se sabe!!!!).
Art. 9. Hablar cualquier lengua no permitida será castigada con cien azotes en la plaza Leopoldina Rosa. En el caso de que dicha lengua sea el esperanto, que sean doscientos.
Art. 10. Cualquier ofensa contra la persona de Alberto Barrios se penará con la muerte.
Art. 11. Sergio Sena apodado "el chileno" pasará a tener el apodo de "el Valicero" y así se lo reconocerá en todo el territorio del Estado.
Art. 12. Todo valiceroparlante es considerado ciudadano del Estado de Valizas en todo su derecho.
Art. 13. El Estado Valicero velará por la buena salud de todos sus súbditos, incluyendo aquellos que viven fuera de sus fronteras.
Art. 14. Los equipos futbolísticos de Castillos y aledaños tienen prohibido ganar cuándo visiten el estadio del Club Social y Deportivo Barra de Valizas, bajo pena de pisotón de pata valicera.
Art. 15. Todos los restaurantes estarán obligados a incluir al menos tres menús que incluyan capiz, muergo o camarón.
Art. 16. EL CAPIZ FM y EL PIS son los únicos medios de comunicación permitidos.
Art. 17. La bandera del imperio de Valizas, será azul de día y negra de noche. Dicha bandera ha de ondear obligatoriamente en todos los edificios del Estado, se usarán respectivamente de día y de noche para no ser vistas.
Art. 18. La Banda de música oficial será 4 Pesos de Propina.
Título segundo
Art. 1. Financiación. El Tesoro será sufragado por un impuesto inversamente proporcional a la riqueza de sus habitantes, así como por un canon sobre el bacalado, el camarón, los coquitos.
Art. 2. Con la aprobación de este articulado se colman las reivindicaciones históricas de Cabo Polonio y Aguas Dulces y así por fin Cabo Polonio y Aguas Dulces son PROVINCIAS perteneciente al Estado de Valizas, sin discriminación sobre el resto que componen la República.
Art. 3. Todas las provincias dependen orgánicamente de Barra de Valizas Capital, como capital del Estado.
Art. 4. La asamblea es la cámara de representación de todos los valiceros y estará constituida por un solo escaño. La autoridad máxima será elegida cada año en Carnaval coincidiendo con la prestigiosa elección de Mr. Valizas, ergo Mr. Valizas será el Supremo.
Título tercero
Art. 1. La moneda del Estado es el butiá, divisible a su vez en otras de menor valor; así 1 butiá equivale a 100 muergos.
Art. 2. La unidad de medida es el capiz.
Art. 4. La medida de capacidad es la damajuana valicera.
Art. 5. Iemanjá, Carnaval y Traiatlón valicera serán declaradas fiestas nacionales, y se establece el día de festividad de la Virgen de los capices como el día de la fiesta nacional.
DISPOSICIONES ADICIONALES
Artículo Único. El poder del Estado de Valizas emana del pueblo. El pueblo emana de la prima y la prima hermana, hace años que no vive aquí. Este Estatuto es incuestionable y legítimo, y para que conste se sella y firma. SMR François

EL VERDADERO ORIGEN DE BARRA DE VALIZAS


por Erik el Rojo
Contrariamente a lo que pregona la historia oficial, la zona cercana a la desembocadura del arroyo actualmente conocido como Valizas fue descubierta por los vikingos, mucho antes de la llegada de los españoles. Mi antepasado, Leopoldo el Gris, llegó a estas tierras hace cientos de años, cansado de los lluviosos veranos noruegos (por dos veranos consecutivos llovió un día, pero hay que considerar que, en mi tierra, los días de calor son tres). Pero no vino solo: junto a él vino un grupo de amigos, todos de su pueblo natal, Valis Haas, con quienes salían de juerga, se emborrachaban, invadían regiones, se emborrachaban, asolaban pueblos y se emborrachaban. Eran temibles, y pronto se hicieron conocidos como "la barra de Valis Haas".
Cuando llegaron a esta zona, construyeron sus castillos a la orilla de una laguna, a la que llegaron por un arroyo serpenteante, la llamaron Helaa Yre, que en noruego quiere decir "laguna a la que se llega por un arroyo serpenteante", y allí vivieron durante años.
Mucho tiempo después, en épocas de Irineo el Blanco, se comprobó que los castillos se habían construido sin permiso, por lo que se mandaron demoler... y para evitar nuevos asentamientos irregulares, en las márgenes de la laguna de los castillos, como se la conocía en ese entonces, se plantaron ombúes, que es una hierba con cuyas hojas los vikingos hacen un té muy digestivo (seguramente nadie ha oído hablar de un vikingo estreñido). Desde esa época, se sabe que no se deben construir castillos en Helaa Yre.
La tataranieta de Leopoldo el Gris, Leopoldina la Rosada, decidió instalarse entonces más cerca de la costa, en una bifurcación de caminos, donde se dedicó a hacer artesanías mientras esperaba con ansias la llegada de otros compatriotas. Su hijo, Polonio, todos los días caminaba varios kilómetros a través de las dunas, hasta una punta rocosa desde la que oteaba el horizonte en busca de algún navío, lo que continuó haciendo aún después de ingresar a la armada; cuando se retiró, con el grado de cabo, se instaló en una torre con una linterna y allí vivió durante años, solitario, sin contacto con la gente del pueblo, salvo por las esporádicas visitas de un francés que allí se había instalado.
Sin embargo, en lugar de compatriotas por mar, con el paso del tiempo fueron llegando por tierra, sobretodo en el verano austral, hordas de extranjeros que, al hablar una lengua extraña, modificaron los nombres de los distintos lugares adaptándolos a su idioma y homenajeando a quienes sentaron las bases del pueblo tal como se lo conoce actualmente. Éstos, compraban artesanías en la bifurcación de caminos en que solía estar Leopoldina Rosa, atravesaban las dunas hasta llegar a las tierras del Cabo Polonio, visitaban la Laguna de Castillos y el Monte de Ombúes, y se emborrachaban como antes lo hacía la "Barra de Valizas", costumbres todas que perduran hasta nuestros días.